La otitis es una inflamación del oído que puede afectar a la parte externa, media o interna. Es una de las infecciones más frecuentes en la infancia, especialmente en los niños menores de 6 años. Según un estudio realizado por el Dr. Blas Sánchez Reyes, otorrinolaringólogo pediatra y especialista en el tratamiento de las enfermedades del oído, la nariz y la garganta en los niños, la otitis media aguda es la causa más común de consulta médica en esta etapa de la vida.
El estudio revela que 7 de cada 10 niños varones de 3 años de edad han sufrido al menos un episodio de otitis media aguda, una cifra superior a la de las niñas, que se sitúa en 5 de cada 10. La razón de esta diferencia se debe a que los niños tienen una trompa de Eustaquio más corta y horizontal que las niñas, lo que facilita el paso de las bacterias desde la garganta hasta el oído medio.
La otitis media aguda se caracteriza por la presencia de dolor, fiebre, irritabilidad y pérdida de audición. En algunos casos, puede haber supuración por el conducto auditivo externo si se rompe el tímpano. El tratamiento suele consistir en la administración de antibióticos y analgésicos, así como medidas higiénicas para evitar la propagación de la infección.
El Dr. Blas Sánchez Reyes recomienda acudir al médico ante cualquier síntoma de otitis, ya que una atención precoz puede evitar complicaciones como la perforación timpánica, la mastoiditis o la meningitis. Asimismo, aconseja seguir algunas medidas preventivas para reducir el riesgo de padecer esta enfermedad, como:
- Evitar el humo del tabaco y la contaminación ambiental.
- Mantener una buena higiene nasal y bucal.
- Vacunar al niño contra la gripe y el neumococo.
- Evitar el uso excesivo de chupetes y biberones.
- Secar bien los oídos después del baño o la piscina.
- No introducir objetos extraños en el conducto auditivo.
La otitis es una enfermedad que puede afectar al desarrollo auditivo y del lenguaje de los niños, por lo que es importante prevenirla y tratarla adecuadamente.