La migraña vestibular es una condición que se caracteriza por episodios recurrentes de vértigo, mareo o inestabilidad, asociados o no a dolor de cabeza intenso. Estos síntomas se deben a una alteración del sistema vestibular, que es el encargado de regular el equilibrio y la orientación espacial mediante el oído interno y el cerebro.
La migraña vestibular afecta aproximadamente al 40% de las personas que padecen migraña, una enfermedad neurológica que provoca crisis de dolor pulsátil en un lado de la cabeza, acompañadas de náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y al sonido, y en algunos casos, alteraciones visuales llamadas auras.
Las causas exactas de la migraña vestibular no se conocen con certeza, pero se cree que están relacionadas con factores genéticos, ambientales y químicos que alteran la función de los nervios y los vasos sanguíneos del sistema vestibular. Algunos desencadenantes comunes son el estrés, los cambios hormonales, el consumo de alcohol, el tabaco, el chocolate, el queso, los embutidos, los edulcorantes artificiales y algunos medicamentos.
El diagnóstico de la migraña vestibular se basa en los criterios clínicos establecidos por la Sociedad Internacional de Cefalea, que incluyen tener antecedentes personales o familiares de migraña, presentar al menos cinco episodios de vértigo que duren entre 5 minutos y 72 horas, y tener al menos uno de los siguientes síntomas durante el vértigo: dolor de cabeza con características migrañosas, sensibilidad a la luz o al sonido, alteraciones visuales o auditivas o inestabilidad al caminar.
El tratamiento de la migraña vestibular tiene como objetivo prevenir las crisis, aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Para ello se pueden emplear fármacos como los betabloqueantes, los anticonvulsivos, los antidepresivos o los antimigrañosos. También se recomienda evitar los desencadenantes conocidos, llevar una dieta equilibrada y saludable, practicar ejercicio físico moderado y regular, dormir bien y controlar el estrés. En algunos casos se puede recurrir a la rehabilitación vestibular, que consiste en ejercicios específicos para mejorar el equilibrio y la adaptación del sistema vestibular.
La migraña vestibular es una enfermedad crónica que puede afectar negativamente a la vida personal, laboral y social de las personas que la sufren. Sin embargo, con un diagnóstico adecuado y un tratamiento personalizado se puede lograr una mejoría significativa y una reducción de las crisis.